12/2/09

Sobre el amor 1


En estos tiempos, lo que Dostoievski describió en su novela El Idiota como amor homicida es un fenómeno con el que nos encontramos una y otra vez. con la misma intensidad con que los seres humanos anhelan el verdadero amor, experimentan a menudo que su amor se truca repentinamente en odio y celos, en venganza e incluso disposición a matar a la persona "amada". Aun cuando el amor siga siendo igual de intenso, en él se entremezclan dudas sobre si el otro me ama en efecto exclusivamente o si no querrá a otro más que a mi. Y no es fácil, en absoluto, apartar tales pensamientos. Estos pueden anidar en el corazón y oscurecerlo. Sentimos que no se pueda dar por sobrentendido que el amor prospere. De hecho, está siempre amenazado por la duda del amor del otro y por la incapacidad propia para amar realmente.
Muchas personas confunden el amor con poseer, quisieran tener a la persona amada para ellas solas. La consideran propiedad suya, propiedad que no están dispuestas a compartir con nadie más. Se aferran para que sólo pueda amarlas a ellas. Los celos pueden convertirse en una cárcel en la que encerramos a nuestra pareja. Pero cuanto más aferramos a la persona amada, tanto más la coartamos y provocamos en ella comportamientos agresivos e incluso a menudo, odio. No hemos aprendido el amor que hace crecer y florecer a la pareja.

No hay comentarios:

Publicar un comentario